Céline Scheen estudió canto clásico, fue su maestra Vera Rózsa, quien la convenció para dedicarse por completo a la música antigua.
Alcanzó un mayor reconocimiento tras participar en la grabación de la película Le Roi danse de Gérard Corbiau con Musica Antiqua Köln, bajo la dirección de Reinhard Goebel, para el sello Deutsche Grammophon. Desde entonces, ha interpretado un amplio repertorio en numerosas producciones operísticas, incluyendo las del Gran Teatro de la Ciudad de Luxemburgo, el Teatro de Caen y la Ópera Nacional del Rin. Cantó papeles como Thérèse en Les Mamelles de Tirésias de Poulenc, Frasquita (Carmen), Grilletta en Lo speziale de Haydn, Zerlina (Don Giovanni) y Philonoé en Bellérophon de Lully. Bajo la dirección de René Jacobs, interpretó Alceste de Gluck, Eliogábalo de Cavalli y La flauta mágica de Mozart en el Théâtre de la Monnaie de Bruselas.
Como concertista, ha cantado papeles solistas en obras que van desde Bach y Mozart hasta Fauré y Orff. Ha actuado con conjuntos como Musica Antiqua Köln, Il Fondamento, Ricercar Consort, Cappella Mediterranea, Ensemble La Fenice, La Cetra Barroco Orchestra Basel, Les Talens Lyriques, L’Arpeggiata y Le Concert des Nations, así como con artistas como Leonardo García Alarcón, Jean Tubéry, Andrea Marcon, Christophe Rousset, Jordi Savall y Christina Pluhar.